La escencia...

Consideramos al relato de una experiencia de pesca con mosca, como algo extremadamente sensorial. Desde lo visual y literario, cada salida de pesca se expresa libre de egoísmos, despojados de los espejismos de las recetas y con la permanente e inefable búsqueda de lo bueno, lo puro y perfecto.

Pescando el Rio Castaño de San Juan.

Calingasta... te nombra la lengua indígena como Pueblo de la Ladera del Cerro; tierra de San Juan.

Aquí domina un paisaje cordillerano de serranías y caudalosos ríos y hacia allá nos dirigimos junto a Tito, Maxi y el pequeño incansable Tiago.

Partimos desde Mendoza como siempre... a la madrugada, eran como las 04:30 hs., con dirección a Usapallata. Allí tomamos la Ruta Provincial 39 que le entrega la posta a la 149 de San Juan, con destino a Barreal, pasando por Pampa del Leoncito.

Así Calingasta nos recibía desde su entraña andina y nos bañaba en las aguas del Río Castaño.En la barrera fitosanitaria de Barreales, consultamos por los permisos y nos dijeron que teníamos que comprarlos al Sr. Kumel, propietario de Cabañas Kumel, y que nadie más los vendía ni en Calingasta, ni en Barreal.

Luego de recorrer 320 kms. desde Mendoza, llegamos a las 8:00 hs. al Río Castaño. Tierra de maridajes del agua, que van formado nuevos causes. El Castaño, nace de la unión del Río San Francisco y el Río Atutia. Recorre su trayecto... hasta volcar tributo de agua ,al poderoso Río Los Patos y forma con este último el Río San Juan.
Aguas cristalinas, bajos caudales, correderas, y pozones bien marcados hacían presumir una buena jornada de pesca... iluminada por un sol radiante , sin nubes.Montamos las Sientific Anglers de flote, en varas # 5 y lideres de 1,40 mts. Los tippets 4x fueron los predominantes.

Las moscas usadas fueron alternadamente, lasPheasant Tail BH, Prince, Hare Ear, Sculpin, Madam X y Páncoras.

Caminamos desde la mina abandonada, aguas arriba y allí, empezó la jornada.

Los piques se dieron rápidamente y con claridad, intercalándose Marrones y Arco Iris con un promedio de 400 a 500 grs.

Tito prendió, con línea de hundimiento, en un gran pozón, una Arco Iris, de un tamaño increíble, que a pesar de ser muy bien clavada, y luego de pelear y saltar dos veces mostrando su blanco abdomen, logró soltarse, lo cual le dejó una sobredosis de adrenalina y una sonrisa agradecida, por la bondad de truchas, que este río ofrece.

El Castaño se impregna de cangrejos de tamaños formidables, bagres bajo cada piedra, alevinos en cada remanso, y libélulas que llegan a molestar.


Es decir, comida abundante por doquier, un río sano, con buena pesca y mucha comida para las truchas. También el río atrae, a otros seres terrestre vertebrados, como culebras. Maxi y Tiago se toparon con una de ellas por suerte... sin mayores inconvenientes.

Correderas muy largas, con pequeños pozones igualmente claros, hacen la delicia del pescador. No dejar pozón sin visitar, ni saltarse ninguna corredera, es una buena estrategia, puesto que en un tramo corto el río, paga con muchos piques de truchas de tamaños chicos pero muy divertidas.

Si buscan truchas más grandes, deberán buscar pozones muy profundos con líneas de hundimiento.

La jornada marcada como siempre, por mucha caminata desde las 8:00 hasta las 18:00hs., nos dieron muchos piques y muchas risas de amigos. Un río para visitar, en varias oportunidades y con muchos objetivos. Muchas truchas medianas o selectivas de mayor tamaño. Puesto que tiene zonas de correderas cerca del camino, donde abundan las primeras, pero hacia abajo del puente que lo cruza, en dirección a unirse con el Río Los Patos, tiene pozones muy marcados y con truchas de mayores tamaños.

El Castaño nos despertó ...alegría, ganas de volver siempre, lleno de ilusiones en cada pool, en cada piedra. Su generosidad hace definir el perfil del mismo y soñar con pescarlo mil veces mas. END.

Autor Invitado: Cristian Gaetan.
Edición: Jorge Aguilar Rech.
Fotografía: Cristian Gaetan.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Magnífico relato, y preciosas fotografías.

Los paisajes son relamente bellos. Pescar en semajante entorno es un privilegio sin lugar a dudas.

Gracias por compartirlo.

Anónimo dijo...

Pero que ganas tengo de ir para esos lados...

Abrazo.