La escencia...

Consideramos al relato de una experiencia de pesca con mosca, como algo extremadamente sensorial. Desde lo visual y literario, cada salida de pesca se expresa libre de egoísmos, despojados de los espejismos de las recetas y con la permanente e inefable búsqueda de lo bueno, lo puro y perfecto.

Pescando en Potrerillos.







Aguas calmas, un desafio permanente. Sin descanso; continuo... Una batalla sin tregua donde el pescador, debe tener en cuenta todos y cada uno de los detalles. Ser obsevador de la luz, marcar el viento, sensibilizarse con la temperatura, observar el emplazamiento, considerar la epoca en la que nos encontramos; tambien moverse con la cautela del zorrito colorado, silencioso, habil ,agazapado; combinando factores y cambiandolos continuamente, acorde a las condiciones del medio que, generalmente tambien cambian. El mosquero se transforma en este ambito en un operador de un vitacora de variables sensibles que, si solo las combina con sabiduria podra, si la naturaleza es prodica , pinchar una trucha.


Las truchas de agua quietas son sin duda un gran rival. Una gran compañera de juegos esquiva.






Inicio de la jornada.

Llegamos al pesquero a las 7:00 am. Pasamos directamente a la costa norte, por el puente de hierro. Ya nos habiamos anticipado solicitando la correspondiente autorizacion.

El Rio Mendoza estaba turbio, marron chocolate. Con bajo caudal. Nos alarmo y fue comentado la cantidad de sedimento que este acumula en la zona de la confluencia al espejo. LA camas de sedimento han tapado en su totalidad las camas biologicas que fueron habitats de pancoras, larvas y huevos.

La linea de agua en esta epoca se encuentra muy baja. Nos emplazamos en la Quebrada del Toro. La temperatura era de 10º y un viento helado del sur traspasaba nuestras ropas.

Personalmente arme mi caña #6 , la linea de flote WF , dirigiendome a la costa en forma sigilosa. El agua estaba muy verdosa. Revise rocas y habian muchas dragon´s. Tome de mi caja una ninfa atada en anzuelo mustad #6 , similar a una Damsel muy lastrada. Comenze a badear desde la costa a contraviento, manteniendo la direccion de los lances a 45º de la linea de la costa. La tecnica era simple : engañar a pez mediante una ninfa de color olive, a profundidad escasa, haciendola nadar y dandole vida con tironcitos erraticos , en un area muy cercana a la vegetacion. Cubrimos aproximaamente 200 metros con la misma tecnica. No tuvimos respuestas.

Un cafe colombiano preparado por mi hijo Nicolas, cambio mi animo y mi temperatura .




Segunda Chance. El Tubo Negro. La Costa Sur.


Tomamos la desicion de cruzarnos al Sur ,al camino del perilago. Recorrimos la zona....eran las 12:00 a.m. y , nos emplazamos en la zona del TUBO NEGRO, despues de la segunda rotonda. Un break para el obligado asado que preparo Aleandro Poblete nos reconforto el alma y el estomago.

Alejandro, quie ya se encontraba emplazado desde hacia unas horas aqui, habia tenido una captura de una arco iris de unos 600 g. muy aguerrida. La pincho con una ninfa de dragon fly olive en el float a unos 10 metros del veril. El hilo del agua estaba a unos 300 mts.

Aqui preparamos nuestros floats y nos dispusimos a ingresar al espejo, aproximadamente a las 17:00 hs. El dia se habia nublado completamente, ayudando a conservar y elevar la temperatura del lugar a unos 22º C. Un suave ventisqueo del sur se hacia presente.

Cuando llegamos al agua, la misma estaba planchada. Tenia una visivilidad a no mas de tres metros de profundidad.

Nos dividimos.... Alejandro Poblete, Luis Martinelli y yo, flotamos tirando al veril, a la vegetacion. Cubriendo la zona en forma horaria. Otros dos amigos, Angel y Sergio Mesias , vadeando en la costa.

Mi estrategia fue simple: cubrir la zona de vegetacion hundida desde adentro y en forma horaria. Cambie a lina de hundimiento 4, con un lider conico de 7 pies y un tipped 3 x de 0,50m. Mi mosca de inicio una Damsel Olive atada en un anzuelo 6. Con ella tuve dos piques muy fuertes.Uno de los cuales me hundio literalmente la caña. Despues de unos minitos cambie la mosca a una Streamer Wolly Bugger Olive lastrada. Inmediatamente de presentada a la orilla del ramage hundido y apenas hundida unos cm tuve el primer jalon.

El proximo lanzamiento en el mismo lugar , deje a la mosca hundir 10 segundos. Comence a dar pequeños tironcitos semejantes a los de un alevino. Al fin la caña se arqueo de un forma espectacular. LA Arco Iris salto 1 metros intentando escapar al pinchazo. Fue durisima la lucha que me ofrecia, pero despues de unos minutos logre metela al copo para la oligada fotografia. Esta resulto pesar unos 800g . Mostro mucho vigor y la solte sin problemas de animacion. El fondo fue su aliado para la vivaz fuga.

Luis, estaba cerca mio. Estaba añocheciendo..... la hora magica. Las arcoiris saltaban por doquier pero siempre atras nuestro, jugando al gallito ciego. Luis intenta con una Wooly Bugger Olive con Eggs Head Red y sin mediar oportunidad para cambier a flote, no deja profundizar mucho la linea de hundimiento. Un grito rompe la quietud de la hora. Me da tiempo a reaccionar y prender la Kodak y enfocarlo. Su caña arqueada la maximo. Una hermosura de Arcoiris de 1,3 kg se dejó ver en un momento. La pelea fue fuerte. Tras algunos pequeños accidentes coperos logro tomarla. Todo un logro, un placer.


Una hermosa y satisfactoria jornada de pesca, con recetas simples, buenas capturas, un buen asado y amigos. Esperando la apertura de temporada.

Jorge Aguilar Rech

La Tellico del Pircas

El Rio Pircas corre, en su cause inferior a unos km antes de volcar sus aguas al Arroyo Grande de la Quebrada, por un amplio valle glaciar. Sus montañas antiguas flanquean, el curso del mismo convirtiendolo en un sin fin de vaivenes.
La vegetacion es baja, espinosa y por momentos impenetrable de sarzamoras y rosas mosqueta.
Rio extramadamente tecnico. Pero a la vez apacionante en sus desafios, sus pooles magicos y sus temperamentales corridas.
Lleno de dificultades en sus bordes, y con una inclinacion en su asceso aguas arriba, de 25º. Impredecible en sus condiciones climaticas.
Encontramos principalmente, truchas arco iris y fontinalis que rondan 0,30 m. Muy combativas y sanas.
Las hemos hallado cuando sube la temperatura del agua durante los meses de setiembre y octubre, aproximandonos a las 1.100 am con evidente actuvidad de alimentacion. Aumentando su selectividad al avanzar las horas del dia.


Los Lugares de alimentracion.
Los sitios donde la trucha se alimenta en estos pequeños cursos de agua, son variados. Existen varios apostaderos o pooles premium: unos de los mas notorios que se relevo es el apostadero del cañon. Se ubica a unos aproximadamente tres kilometros desde el camino y ultimo puesto rio arriba. Aqui se ubica este Pool donde siempre hemos tenoido una captura importante de un gran arco iris. Otro de los pooles importantes se hallan cercanos a la antena



La Selectividad.
La Arco Iris.
Las truchas de este rio son muy selectivas. Un caso muy comentado en este rio, fue durante una de nuestras salidas donde en la corriente terciaria se apostaba un arco iris de unos 30 cm. Sobre ella un pequeño pozon. Se complicaba la presentacion de cualquier engaño dado que la rosa mosqueta hacia un tunel arriba de ella. Comenze tirando aguas arriba, al pozon superios con una Tellico atado por Sergi Vicente, en la modalidad de deriva natural. Una linea de flote y a ella un lider conico de 4 pies y un tipped 3 x de escazos 0,40 m. La reaccion de la Arco Iris fue inmediata pero toco vilentamente el engaño, sin tomarlo. Asi estuve unos minutos y la misma reaccion era visible. Con extremo sigilo cambie la mosca, una tellico atada por mi.....sin resultados ni siquiera interes de la misma para lograr solo arrimarse al engaño. Era evidente, la trucha habia reconocido el patron del engaño y lo rechazaba. Inmediatamente cambie a una Hare Ear's Rubber Legs. Trabajada con histericos tirones y bribraciones , haciandola emerger desde abajo hacia arriba. La misma reaccion del animal. Un toque violento y despues el desinteres. La tercera mosca candidateada era la Montana Yellow. Convenciendome que iva a reaccionar igual, la lance Up Stream, deriva....... y pinchazo. Si , esta vez logre un franco pinchazo de la trucha .



La Tellico y las Fontinallis.


Tal para cual. Una mosca para esa trucha en ese lugar y epoca. Las Tellico amarillas con excelentes resultados . La mismas pero rojas ....mortales.
Atadas en la forma clasica, sobre anzuelo Mustad #6, trabagadas como emergentes, dejando profundizar, y levantando la mosca hasta el hilo de tension del agua; esta ninfa resulta muy productiva a la hora de hacer una diferencia.
Esto no quita que alguna pequeña inexperta arco iris se sienta atraida por la Tellico.



Tecnicas Up y Down Stream.

Ambas ....son eficaces e incluso es muy bueno para la modalidad con ninfas la tecnica de de Caña en Alto. Sobr todo al ubicarnos en un pozon pequeño detras de una roca. Lo mas importante: nunca perder de vista la mosca. Es determinante la rapida clavada y esto solo se dara si vemos a la trucha.







Jorge Aguilar Rech


Mel Krieger . La persona







Es considerado uno de los mejores pescadores de Flycast del mundo. Tiene 80 años y hace más de 45 que practica este deporte. Actualmente dedica su tiempo a dar clínicas de casteo por todo el mundo. Entre los numerosos países que recorre, Argentina es uno de sus preferidos. Hace poco estuvo en El Calafate y nos reveló algunos de sus secretos y el por qué de su pasión por la Patagonia.

El Calafate (PP). Mel Krieger sonríe. No es un momento fugaz de su rostro, una expresión pasajera. Mel Krieger siempre sonríe. Está parado en el jardín del Hotel Posada Los Álamos y nos mira detrás de sus lentes. "Mi oído no es bueno", explica en inglés, ya que Mel no habla ni dos palabras de castellano, aunque viene a Patagonia hace más de 40 años y tiene numerosos amigos argentinos. "Es culpa de mi oído" nos repite. De costado vemos un audífono prendido a su oído. "Los sonidos entran pero no puedo decir qué son. Por lo tanto mi lenguaje es terrible. Mi hijo de 44 años enseña español en la escuela y hasta mis nietos hablan español (ellos tienen 15 y 12 años)" nos comenta mientras ríe.La tarde es maravillosa y Mel está a punto de iniciar una clínica de casteo en el jardín del hotel. Escondido debajo de una gorra de pescador, en la que lleva una mosca prendida, Mel nos mira a través de sus lentes y nos pregunta: "¿de qué vamos a charlar". "De pesca, de su vida", le contestamos, sin saber hasta qué punto esas dos cosas no forman parte de una misma.


- ¿Cómo empezó su pasión por la pesca?-

Viví en distintas partes de los Estados Unidos, pesqué durante mucho tiempo Black Bass (especie de perca) pero con cuchara, todavía no agarraba la caña de mosca. Cuando me mudé a San Francisco, tenía unos 30 años, tuve un primer contacto con la técnica de "flycasting" y allí aprendí a castear. Era un hombre joven, empezando una familia pero todas las semanas le dedicaba al menos un día a la pesca. De lunes a viernes trabajaba, el sábado era mío y el domingo se lo dedicaba a mi familia. En unas pocas semanas me di cuenta que era lo mío. Mi primera dificultad fue tal vez aprender a pescar y pescar al mismo tiempo. Fui muy afortunado porque en San Francisco se encuentra uno de los mejores sitios para practicar flycast en el mundo y tenemos un par de campeones mundiales de flycast. Yo siempre fui muy competitivo, jugué golf, tenis y, bueno, me anoté en los torneos de casteo.


- ¿Cómo aprendió a pescar?-

El secreto de aprender a castear es realmente simple: castear. (Hace un gesto con sus manos, como si estuviera tirando con la caña, al cuál acompaña con un chasquido de lengua). Es como andar en bicicleta, cuando sos chico te preguntás cómo hace alguien para andar sobre eso y después te subís y simplemente lo hacés. El secreto es hacerlo, pero mucha gente no tiene verdadera confianza en sí misma. Algunos tratan de jugar al golf y no son buenos, tratan de jugar al tenis y no son buenos, prueban fútbol y no son buenos, esa es la persona promedio. Entonces prueban esto por una hora y dicen "otra cosa que no puedo hacer". Pero no es así, todos pueden aprender a castear. Obviamente algunos aprenden más rápido que otros.
Alrededor nuestro van llegando de a poco diversos hombres con cañas en la mano. Son empresarios o comerciantes de la localidad que vienen a pasar una tarde con Mel Krieger y ver si pueden aprender algunos trucos o simplemente entender cómo se tiran esos extraños señuelos que parecen insectos. Paramos la entrevista, todos quieren sacarse fotos con el maestro. Luego volvemos a la charla.


- ¿Hace cuánto que pesca en Patagonia?-


Hace casi 40 años. El primer lugar en el que pesqué fue Junín de los Andes. Durante mi primer viaje pesqué en Junín, en Bariloche y en Río Grande, Tierra del Fuego. Y después fui al norte del río Quillén (Neuquén), al sur de Esquel y alrededores. Desde entonces he retornado prácticamente todos los años. La primera vez fue en la década del 70. Yo tenía un grupo de gente que llevaba a pescar a Nueva Zelandia, tenía una agencia muy pequeña, pero me iba bien. Me llamaban de diferentes países y la cosa empezaba a marchar. Un día me contacto el gerente de Aerolíneas Argentinas y tuvimos varias reuniones, y él fue el que me dijo: "Tenés que conocer mi país". Yo le dije "no conozco nada allí". Y trató de organizarme un viaje y terminé yendo. Cuando llegué a Buenos Aires no encontré a ningún guía. La pesca con mosca no era lo que es hoy en día. Por ese entonces el Bebe Anchorena me comentó que en el país entero no había más de 300 pescadores con mosca y debo asegurarte que no he visto ningún país del mundo en el que la pesca con mosca crezca tanto como lo ha hecho aquí. Ha sido maravilloso.


- ¿Por qué decide retornar a Patagonia cada año?-

Por muchas razones. Creo que es una de las mejores áreas de pesca del mundo. Y también pienso, a pesar del hecho de que hay muchos pescadores de mosca en Argentina de que ésta es el área más extensa para practicar flyfhishing de todos los lugares que he estado en el mundo. Puedo decir que he estado enseñado en más de 30 países, por lo que he estado viajando mucho a lo largo de los últimos años. Ciertamente Patagonia es uno de los mejores lugares de pesca del mundo. Lo interesante de esto es que en Patagonia aún hay áreas de difícil acceso, que no son tan conocidas, también hay otras como Río Grande (Tierra del Fuego) donde encontrás un pescador en cada vuelta del río, que es lo mismo que ocurre en Estados Unidos, donde pagan mucho dinero para lograr pescar grandes piezas. Para mi ésto ahora es aburrido. Pero un río como el Gallegos recién ahora se está convirtiendo en un Lodge de pesca. Vos vas a Río Gallegos y nadie sabe con precisión dónde están los peces, es una aventura, hay muchos ríos como éste en Patagonia. Por eso aquí hay un poco más de aventura. En Estados Unidos tenemos un montón de lugares fabulosos de pesca, pero donde todo es conocido y acá todo es desconocido. Es verdaderamente maravilloso, lo bueno de Patagonia. Obviamente a través de los años he hecho muchos amigos y adoro el entusiasmo, la emoción y se podría decir la pasión de los argentinos.

- ¿Qué nos diferencia de otras áreas de pesca del mundo?-



Nueva Zelanda por ejemplo es un lugar maravilloso, el agua es increíble, el paisaje es muy bonito y la pesca es muy buena. Pero cuando la gente me pregunta para comparar yo siempre digo que hay dos grandes diferencias: en Nueva Zelanda si pescás un pez de 4 kilos podés decir que es una buena pesca, en Argentina abren una botella de vino y se celebra a lo grande; también a la hora de comer, ellos sirven dos piezas de pan blanco con un pedazo de queso que podés ver a través de él, a lo sumo una cerveza sentado al borde del río, en Argentina matan un cordero y abren una caja de vino, hay mucha pasión acá que no existe en otros lugares. Hay muchos otros grandes lugares para pescar como Rusia, es un nuevo lugar que se está conociendo. Pero aún ahí lo que pasa es que gente con dinero monta un Lodge y te llevan a pescar ahí, a lugares que se vuelven terriblemente accesibles, pero realmente los buenos lugares son un misterio. Patagonia es suficientemente grande, su población no es muy grande, no tienen grandes industrias y negocios que contaminen el agua. Hay algo en Argentina que es maravilloso, como el número de parques nacionales, que son públicos y accesibles para todos los habitantes. Ustedes tienen un pequeño complejo con los dueños de las estancias que montan Lodge y cierran las áreas, para hacer un poco más de dinero, pero ese es un conflicto que existe en todos lados, pero en Argentina hay grandes cantidades de agua con acceso público.


- ¿Cuánto tiempo estará en el país?- Espero estar aquí durante todo enero, dando una clínica en Esquel y otra clínica en Mendoza. En Argentina en general siempre la he pasado muy bien. Aún disfruto mucho de viajar y ahora tengo muchos amigos en tantos lugares. Cuando voy a Mendoza muchos me conocen desde hace más de 5 años, incluso gente de Mendoza ha ido hasta Bariloche cuando yo estoy ahí, para encontrarnos. Fue un año en el que terminé más gordo por la cantidad de corderos que comimos. Para mi Argentina ahora es un lugar maravilloso para conocer.- ¿Usted prefiere pescar en ríos o lagos?- Prefiero los ríos a los lagos. Además prefiero los ríos pequeños ahora, aunque los grandes peces están en ríos como el Limay, el Santa Cruz, o el Río Gallegos. Me gustan los dos, pero si tengo que elegir, elijo un río pequeño con aguas tranquilas, cuando la pesca se vuelve difícil y es un verdadero desafío sacar la pieza del río. Esa es la mejor pesca del mundo. Yo pienso en eso como un juego de ajedrez, en cambio en los grandes ríos es tirar lejos y traer. En las aguas tranquilas de los ríos pequeños uno siempre se puede llevar sorpresas.


- ¿Cuál sería para usted la caña ideal para pescar en Patagonia?-

Creo que la caña más versátil para pescar en Argentina podría llegar a ser una #6, porque podés pescar en lagos y en ríos como el Limay o el Chimehuín o el Collón Curá. Podés usarla con todo tipo de línea, de flote o de hundimiento. Ahora para pequeños ríos me quedo con una caña #4, y para Sea Trout o Dorado con una #7 u #8. Si tuviera que sugerir una caña para el que recién comienza a pescar le diría que lo haga con una #6.


- ¿Cuál es su pez preferido? -

La trucha marrón. No es tan fuerte como otras, incluso las arco iris dan mejor pelea, pero me quedo con las truchas marrones porque me han sorprendido. La pesca de truchas marrones se puede convertir en un verdadero juego de ajedrez, porque tenés que poner todas tus habilidades en el asunto. Le ponés una mosca y nada, se la cambias y nada… Y así sucesivamente hasta que a veces, sólo a veces, terminás ganando. Es un pez maravilloso.

- ¿Luego de tantos cursos y de pescar, no ha ido perdiendo un poco la pasión y el entusiasmo por la pesca?-

La pesca es una parte muy importante de mi vida, pero creo que poder conectarse con la gente es más importante. Eso es lo que encuentro cuando enseño. Estoy haciendo una clínica y de pronto alguien hace una mejora, aprende algo nuevo y eso se siente muy bien, incluso es mejor que pescar un pez. Disfruto mucho enseñar, es todo un desafío. He escrito otro libro porque tratar de comunicar puede ser muy difícil, pero tratar de comunicar una habilidad física, aún pienso que es instantáneo, no sé cómo se da. Volvemos al tema de que "si querés andar en bicicleta, subite a una bicicleta". Por eso digo, es fácil, mirá, sólo hay que castear. Yo les explico toda la técnica, pero en realidad ellos no aprenden por lo que explico, no se transmite así, a veces aprenden por ver, pero la mayor parte de las veces aprenden desde un lugar que yo considero que es el mejor, que es desde el lugar de la sensación, de sentirlo. Ese es el mejor camino. Yo creo que siempre se pueden hacer progresos. Hace mucho tiempo intenté hacer golf, creo que la instrucción es terrible: ves a la gente tensa, te apretás dos dedos, movés la rodilla izquierda, movés el pie a la derecha un poco, pero lo intentan y logran ciertos avances pero de manera biomecánica. Ellos conocen ciertas técnicas, pero todas mecánicas. Nosotros también sabemos eso en el Flycast, pero yo creo que ese no es el verdadero secreto para aprender. Cada ser humano es único. Uno puede aprender oralmente, otro sintiendo, otro mirando. Creo que todavía tenemos mucho que aprender sobre el proceso de aprendizaje. Por ejemplo agarrás un principiante, le das una caña y que simplemente empiece a castear, hay gente que no tiene problemas con eso y aprenden rápidamente. Conozco gente que practica por horas y pueden tirar el señuelo a millas de distancia, yo creo que son buenas condiciones, como un jugador de fútbol que puede tirar la línea a 40 metros, pero no pueden hacerlo a 10 metros. Es increíble, pero es un mal aprendiz, un gran tirador de línea, pero es un mal aprendiz. Estoy escribiendo un libro sobre cómo enseñar, cómo comunicar. Lo mejor que puedo hacer es seguir buscando nuevas respuestas. Es un desafío para el resto de mi vida, y es algo que disfruto mucho.


- ¿Considera que le queda algo por aprender?-

Absolutamente, todavía estoy aprendiendo a castear. Siempre hay técnicas por descubrir, es un mundo de desafíos. Conozco gente del norte que tiene técnicas diferentes, que pescan a través de los árboles, es algo increíble. Por eso, tengo que aprender a castear así. Hoy ya no tengo la fuerza de brazo o el timing de una persona más joven, pero aún continuo pescando y aprendiendo. El secreto de un pescador, el secreto de un profesor, el secreto de la vida es simplemente uno: continuar.



Compaginado por Jorge Aguilar Rech.

de Juan Cruz Ordóñez del PORTAL PATAGONICO

Tecnica en los Pozones




Para muchos pescadores, los pozones en un río son motivo de especulación casi mística. "¿Qué tan grandes serán los peces ahí en el fondo? ¿Cuántos habrá? Apuesto a que las truchas de ahí son magníficas". Sin mayor análisis, es claro que en un pozón los peces encuentran condiciones ideales para establecerse: un nivel de temperatura adecuado; un nivel de turbiedad mínimo, si es que la corriente del pozón es relativamente suave; además, la posibilidad de mantenerse a salvo de depredadores, gracias a la profundidad; y con una fuente de alimento constante siendo entregada por la entrada al pozón. Condiciones ideales.
Todos los ríos tienen pozones, que básicamente son un ensanchamiento, en ancho y/o profundidad, del lecho del río, provocando que el flujo de agua se desacelere para poder cubrir el nuevo diámetro del lecho. Por esta razón es un lugar adecuado para peces que no requieren pelear contra una corriente constante y permanecer cerca de la fuente de alimento.


El uso de distintas moscas en la pesca en un pozón depende principalmente de los organismos presentes en el río. Aún así es posible establecer ciertas condiciones especiales para los pozones, como es la disminución de la efectividad de las moscas secas o cualquier patrón presentado delicadamente cerca de la superficie. La razón es simple: muchas veces los peces se encuentran más lejos de la superficie si el pozón es profundo, por tanto no les resulta tan rentable subir un par de metros para engullir un pequeño insecto. Las excepciones a esta “regla” se dan en el caso de eclosiones muy marcadas, en cuyo caso los peces se mantienen cerca de la superficie mientras dure la abundancia. Aún así, como norma general si la actividad entomológica está disminuida, el uso de ninfas en las cercanías del fondo es la mejor receta para el éxito.
En los pozones se reconocen tres secciones: la cabeza, el cuerpo, y la cola. Cada una de éstas debe trabajarse de una manera distinta, por lo que se hace necesario entender cómo funciona cada una de ellas desde un punto de vista hidrológico y también cómo se adaptan los peces a las condiciones de una u otra.


Pescando la cabeza de un pozón


Se entiende como la cabeza del pozón a aquella sección de éste en que la corriente entra, muchas veces proveniente de un pequeño rápido o incluso un escalón de agua, con agua cayendo y oxigenándose. Es esta entrada una fuente constante y abundante de alimento y oxígeno, lo que provoca que los peces se agrupen en la cabeza del pozón en espera del alimento que entra directamente y también en los lados.
La forma de enfrentar esta sección es con una ninfa, ya sea lastrada o simple, que se posiciona en la sección entrante del agua y se la deja hundirse. Para apoyar su inmersión, se recomienda manejar la línea de modo que no sea arrastrada excesivamente por la corriente entrante, permitiendo que la ninfa se hunda lo suficiente como para entrar en la línea de corriente en que el resto de las ninfas naturales también son arrastradas.
Cuando la mosca ya entró al pozón se debe mantener la misma presentación sin arrastrar la mosca mientras dura la corriente principal. Ideal es poder posicionar la mosca de manera que su recorrido se acerque más a los límites entre la corriente principal y los costados, que es donde muchas de las truchas esperan su comida: cerca de la corriente, pero fuera de ella, para evitar tener que esforzarse para sostenerse en su posición.
Una alternativa en el caso de pozones de entrada muy profunda es el uso de patrones lastrados y además con un split shot o peso de material no tóxico que se le agrega al líder a unos pocos centímetros de la mosca. Esto provoca, por el peso, que se hunda con mayor rapidez, aunque al usar equipos mosqueros livianos (por ejemplo, un #3 o un #4 o en especial un #2) el lanzamiento preciso se hace más complicado.
Pescando el cuerpo de un pozón
En muchos casos la profundidad de un pozón no será excesiva, por lo que el uso de una ninfa lastrada o un armado con split shot permitirá cubrir la profundidad del pozón sin mayor dificultad. Incluso en el caso de utilizar un indicador de pique junto con algún elemento de lastrado permite extender el largo del líder sin perder control del lanzamiento y la presentación y por tanto, llegar más abajo en el pozón.

En los pozones cuya profundidad es ampliamente más que el largo de cualquier líder razonable (más que 2 metros de profundidad), se recomienda utilizar una línea de punta de hundimiento (sinking tip) o una de hundimiento uniforme, con un corto líder de menos de 2 metros y una ninfa pesada. Se lanza levemente corriente arriba, se deja que la línea tome profundidad, arrastrando la imitación hacia abajo, y luego se la deja derivar libremente. Si el pozón tiene mucha corriente la posibilidad de lograr esta presentación disminuye, precisamente porque no existe tiempo suficiente para que la línea llegue abajo.
La recogida debe ser lenta. La idea es mantener la mosca rondando en fondo tan lentamente como un insecto natural. Las picadas serán muy sutiles y suaves, y no existe la posibilidad de utilizar un indicador de pique para avisar de la tomada. Para solucionar esto, se debe mantener la punta de la caña apuntando hacia la línea, de modo de mantener el máximo de sensibilidad a cualquier interacción en la punta de la línea y el líder. Al sentir algo de tensión en el avance natural, se debe clavar, porque es posible que se trate de un pez tragándose la ninfa.



Pescando la cola del pozón
Donde el agua se eleva nuevamente y comienza a tomar velocidad se deben aplicar los métodos descritos para la cabeza del pozón, o bien se debe enfrentar esta sección tal como si fuese un trecho recto del río de similar profundidad y corriente. Por ejemplo, el uso de ninfas arrastradas por el fondo con la ayuda de un split shot es un esquema exitoso. También, de darse las condiciones adecuadas para una eclosión de insectos, es posible lograr buenos resultados con la imitación de insecto emergente o adulto que forme parte de la eclosión en progreso.
Es posible terminar la presentación comenzada en el cuerpo del pozón al dejar que la mosca se “columpie” al final del pozón, dándole a alguna trucha atenta la última posibilidad de ataque. Simplemente se mantiene el derive que la misma mosca trae desde la sección media y se la deja recorrer en un arco la última sección del pozón. Muchas veces, las picadas son más notorias que en el cuerpo del pozón y las truchas estarán dispuestas a atacar fieramente un insecto que pretende nadar y no dejarse llevar por la corriente.
Finalmente, si el pozón es más bien pequeño, será posible hacer una única presentación que cubra desde la cabeza del pozón, derive libremente por la corriente principal que cruza el cuerpo del pozón y finalmente, recorra en un arco la cola del pozón esperando que alguna de las truchas residentes ataque dicha oferta tan persistente.
Los pozones son una verdadera fuente de oportunidades para el pescador dispuesto a enfrentarlos sistemáticamente. En los meses calurosos, cualquier río ofrece a las sensibles truchas un santuario de condiciones ideales, tanto en temperaturas como en oxigenación y son los pozones los lugares más buscados.Suerte en el río.

Vision de las Truchas. Importan los Colores

El agua juega con los colores de nuestras moscas, si sabemos como lo hace, nuestra forma de mirar un río cambiará para siempre.Una enorme cantidad de moscas y señuelos están diseñadas para atraer al pescador sin tomar en cuenta que los colores de las moscas no lucen igual en el agua que en el aire. Lo que nosotros vemos no es lo que ven los peces como demuestra claramente cualquier fotografía o filmación subacuática. Los sedimentos, residuos de todo tipo y organismos microscópicos del agua filtran selectivamente muchos de los colores de la luz visible mientras esta penetra en un cuerpo de agua. Los peces han adaptado su vista al tipo de agua en que viven y muchos colores que vemos en el aire no existen en diferentes aguas y profundidades. La visión es muy importante en los peces cazadores sobre todo para los que viven en aguas claras, pero no tenemos que olvidar sus otros sentidos. Los peces cazadores pueden arreglárselas muy bien sin la vista para localizar la comida siempre y cuando esta deje un rastro de aroma o vibraciones. Los pescadores que usan carnadas naturales no tienen que prestar tanta atención a la vista de los peces, pero los mosqueros al no contar en las moscas con aromas penetrantes ni grandes vibraciones necesitamos que las mismas sean detectadas fundamentalmente con la vista para lograr el pique.



UNA BUENA BASE

Cuanto más profundo es nuestro conocimiento acerca del comportamiento de los peces y el medio en que viven, nuestra capacidad para resolver diversas situaciones de pesca aumenta sensiblemente De alguna manera tenemos que saber que sucede debajo de la superficie con nuestras moscas y como reaccionaron criaturas tan altamente especializadas como los peces. Por desconocimiento basamos nuestra pesca en criterios basados en nuestras experiencias y sentidos fuera del agua. Esto puede servirnos con moscas que flotan pero debajo del agua el juego es bien diferente.


DEFENSAS INCREÍBLES

Si bien esta segunda nota la dedicaremos fundamentalmente a los colores y la luz debajo de la superficie, no quisiera ni por un momento que pensaran en la vista como el principal sentido de los peces. De poder preguntarle a un pez cual es su principal arma de defensa, seguramente respondería que es su sofisticado sistema para detectar vibraciones, presión y sustancias químicas en el agua. Un ser humano ciego difícilmente podría sobrevivir sin ayuda, pero un pez privado de la visión parece arreglárselas sin mayores inconvenientes. Se han realizado muchos estudios sobre la visión de los peces pero muy pocos sobre los demás sentidos. Las fábricas de moscas y señuelos saben la importancia del color y las vibraciones de diferentes frecuencias, pero siguen diseñando engaños fundamentalmente destinados a pescarnos a nosotros. Quién de ustedes compraría una mosca o señuelo de color desagradable?. Somos criaturas que viven profundamente los colores pero sabemos muy poco de su uso bajo el agua. Este será el tema de hoy pero antes creo necesario ocupar algunas líneas describiendo un poco otros sentidos de los increíbles adversarios que enfrentamos.


TAN DIFERENTES Y PARECIDOS

Si bien la forma en que nadan, se alimentan y viven los peces puede variar bastante de especie en especie, constituyendo estos detalles las características particulares de cada una, el comportamiento general de los peces se parece bastante. Conociendo lo que tienen todos los peces en común nos permite dedicar todo el tiempo a las diferencias particulares, fuertemente condicionadas por el medio en que viven. Solemos pensar en los peces como animales primitivos, como en fósiles vivientes bastante menos evolucionados que otros animales que nos rodean como nuestros queridos perros, sin darnos cuenta que los peces han evolucionado hasta convertirse en refinados organismos dotados con sentidos capaces de detectar estímulos que ni siquiera nosotros con las mejores máquinas podemos medir. Ni siquiera el más moderno de los submarinos podria competir con los sistemas de detección de los peces. Paralelamente la evolución natural defiende a los peces expuestos a los pescadores deportivos adaptándolos para evitar sus engaños y transmitiendo genéticamente estas adaptaciones a las generaciones posteriores. Los peces tontos o fáciles de pescar son rápidamente eliminados del medio natural. Día tras día las razas de peces que sobreviven son más resistentes a ser engañadas por lo que nuevas técnicas y mayores conocimientos tienen que reemplazar a los pasados. Por necesidad tenemos que conocer mejor los hábitos y características de nuestros antagonistas para anticipar las posibles reacciones ante la mosca.

EQUIPO DE SUPERVIVENCIA DE LOS PECES
Muy pocos pescadores se dan cuenta del equipo de supervivencia que poseen los peces. Solemos pensar solo en lo que nosotros podemos ver y sentir fuera del agua sin darnos cuenta que los peces aparecieron sobre la tierra unos 560 millones de años antes que nosotros y desde ese momento han refinado al máximo sus sentidos. Algunos de esos sentidos los tuvimos y usamos en épocas lejanas para cazar y evitar los depredadores, pero los hemos ido dejando de lado al agruparnos y formar comunidades.El sistema sensorial de muchos peces cazadores incluye a los ojos ubicados perfectamente para localizar las presas en un amplio campo sin tener que girar para mirar, lo que ahorra energía. Los campos de visión monocular y binocular permiten detectar la presa y fijar su posición exacta en el momento del ataque. La visión de los colores de los peces se adapta al tipo de agua y cantidad de luz presente por esto saber como se trasmite la luz en diferentes aguas y a distintas profundidades es fundamental si deseamos que nuestras moscas sean vistas con facilidad.El sistema olfativo de los peces es extremadamente sofisticado y lo usan para localizar comida a distancia o en condiciones malas de visión, así como para orientarse en su medio por los aromas y detectar intrusos que impregnan el agua con sus olores. Tan evolucionado es el sistema olfativo de los peces que les permite detectar una sola molécula de sustancia entre millones de moléculas de agua. Los peces pueden detectar una molécula de sustancia entre 10.000.000. 000.000.000 de moléculas de agua, algo que ni el más fino perro de caza puede soñar. Cuando un perro sigue un rastro de olor tiene que cruzar el rastro zigzagueando constantemente para determinar el origen del rastro. Un pez en cambio es capaz de determinar la concentración del olor en el mismo rastro, e ir directamente al origen localizándolo desde distancias increíbles. Un olor negativo en la mosca puede hacer que sea rechazada totalmente sobre todo en aguas lentas y cada vez que la lanzamos y recogemos esta deja un rastro de olor detrás que puede ser detectado fácilmente por los peces. El olor puede explicar por que un pescador tiene pique y otro no, en el mismo lugar y con la misma mosca.El sistema quimiorreceptor de los peces es cientos de veces más refinado que el nuestro considerando su capacidad para distinguir estímulos químicos. Los peces tienen sentido del gusto no solo en la boca sino en otras partes del cuerpo como aletas y cola. Literalmente pueden degustar a distancia con el cuerpo. Nosotros con el gusto generalmente podemos distinguir cuatro sensaciones diferentes: salado, dulce, ácido y amargo sin embargo los peces nos aventajan notablemente pudiendo diferenciar diferentes sustancias entre sí como aminoácidos, proteínas, grasas, azúcares llegando incluso a poder distinguir diferentes clases dentro de cada una de las sustancias anteriores. Con esta capacidad rápidamente pueden elegir diferentes peces, ninfas y crustáceos según su preferencia, simplemente siguiendo su rastro químico que difiere en cada alimento. Los humanos transpiramos constantemente y se ha probado que el solo lecho de meter las manos en el agua puede detener el movimiento de los peces y alejarlos completamente. Hay muchos olores y gustos negativos para los peces con los cuales sin darnos cuenta impregnamos nuestras moscas, a quién se le hubiera ocurrido que aminoácidos presentes en la transpiración de una mano son suficientes para desviar o detener un cardumen de salmones migrando. Ni hablar de repelentes, combustibles y otros con los que contaminamos las moscas. El sentido del tacto también está perfectamente desarrollado en los peces tanto en la boca como en el cuerpo lo que les permite darse cuenta del anzuelo y el engaño de inmediato.El sistema auditivo es especialmente importante para los peces siendo capaces de oír altas y bajas frecuencias con gran facilidad. Pueden oír el ruido que produce la cola de un pez pequeño filtrando este sonido de los propios ruidos corporales reconociendo el tipo de especie que produce el ruido, algo muy importante en un medio donde la vida se reduce a comer o ser comido. Si tomamos en cuenta que los sonidos bajo el agua se desplazan casi 5 veces más rápido que en el aire entenderemos la importancia que tienen para los peces y los pescadores como elemento positivo y negativo según los empleemos. Los peces emplean el oído junto a su ultra sensible línea lateral capaz de captar vibraciones de muy baja frecuencia como las generadas por otros peces al moverse. Las ondas de presión producidas por peces y otros cuerpos al moverse en el agua son captadas de inmediato por la línea lateral lo que permite navegar en densos cardúmenes sin tocarse aún en las maniobras más violentas. Todos los sistemas sensitivos del pez están conectados a los músculos y al cerebro permitiendo reacciones instantáneas ante el menor estímulo. El cerebro de los peces sin embargo es de tamaño insignificante si lo comparamos con su masa corporal por lo que las reacciones deben ser mayormente automáticas y esto es lo que tenemos que aprovechar presentándoles un buen estímulo. En muchos peces cazadores como las truchas los lóbulos más grandes del cerebro son los que gobiernan la visión y el olfato. A los lóbulos ópticos de las truchas llegan nervios que mueven músculos del cuerpo y de las aletas, así como nervios de los receptores del tacto, olfato, gusto y línea lateral. Estimulando eléctricamente el lóbulo de la visión se obtienen movimientos coordinados de ojos y aletas por esto se cree que los lóbulos ópticos de estos peces controlan gran parte del comportamiento y aprendizaje. Como podemos notar, vencer las defensas de un pez es como atacar una base militar en alerta roja. Solo un plan perfecto, ejecutado con el máximo cuidado puede hacer picar a un pez entrenado en una zona donde los pescadores son frecuentes. Lejos de arruinar un lugar la pesca regular con devolución entrena a los peces contra nuestras artes, lográndose ejemplares complicados de engañar y altamente deportivos. Esto es lo que debe buscar un verdadero pescador de mosca, que es muy diferente a sacar un pescado tras otro en medio de un cardumen sin arte ni gracia. Tendrán que perdonarme los frecuentes cambios de tema.Simplemente cuando escribo sobre mi hobby favorito nunca me alcanza el espacio para explicar todo lo que me viene a la mente.

LUZ, AGUAS Y COLORES
Los fabricantes de moscas y señuelos explotan lo dependientes que somos del color en la vida cotidiana produciendo modelos que nos capturan antes a nosotros que a los peces. Es muy raro que un pescador compre algo de colores que no son de su agrado. Muchas veces tratamos de recomendar una mosca por su acción o forma pero finalmente si el color no agrada al comprador este la rechaza. El color de la mosca en el aire puede ser muy diferente al que ven los peces y los cambios de color pueden suceder aún en profundidades muy reducidas afectando la capacidad de los peces para detectarla. Muchas veces los peces miran la mosca desde cierta distancia lo que pone una masa de agua entre la mosca y el pez afectando el color de la masa de agua el color de la mosca de manera similar a lo que sucede cuando miramos a través de niebla o humo o un vidrio coloreado. Por esto al pensar en el color de la mosca bajo el agua tenemos que pensar como cambia la luz a diferentes profundidades en diferentes aguas y la cantidad de agua que ponemos entre la mosca y el pez.


DIFERENTES AGUAS


Al pescar encontraremos diversos tipos de agua pero generalmente basta con pensar en cuatro tipos:
AGUAS CLARAS: De tono azulado como las del sur o de mar.
AGUAS VERDES: De ríos y lagunas bajos saturados de algas unicelulares.
AGUAS TURBIAS: Ríos y lagunas con sedimentos aluvionales.
AGUAS NEGRAS: De color té, por la cantidad de materia orgánica de origen vegetal.Cada tipo de agua filtra la luz que llega a ellas de manera diferente eliminando colores a medida que cambia la profundidad. En cada tipo de agua tenemos que tener una idea de cómo se ve nuestra mosca a diferentes profundidades y desde diferentes distancias, para elegir los modelos y colores que puedan ser vistos fácilmente por los peces tomando en cuenta hacia donde están mirando. Todos sabemos al menos inconscientemente lo importante que son los colores de la mosca. Por algo cuando otro compañero saca y nosotros no, enseguida le preguntamos acerca del modelo y color de mosca que está usando. Lo importante es saber porqué un color distinto puede hacer una gran diferencia lo cuál aunque parezca mentira no es demasiado complicado. Primero veamos mediante unos esquemas como las diferentes aguas filtran selectivamente los colores y recordemos que un color solo se verá como en el aire si el agua deja pasar luz de ese color. También recordemos que los fluorescentes a corta distancia siguen brillando fieles a su color externo aunque sean iluminados por longitudes de onda inferiores, pero si los ilumina una longitud de onda mayor se vuelven totalmente opacos.Antes de seguir avanzando aclaremos algunos conceptos como, fluorescente, fosforescente y Luminiscente ya que con ellos vienen identificados muchos materiales y es bueno saber la diferencia.



FLUORESCENTE: Es una sustancia que recibiendo luz de una longitud de onda menor al color de la sustancia la reemite de inmediato como luz de longitud de onda mayor. Por algo cuando iluminamos algo fluorescente con luz ultravioleta (luz negra) invisible realmente, el objeto devolverá una luz visible muy notable y brillante. Debo aclarar que todas las lámparas de luz negra emiten algo de luz violeta o azul que no es ultravioleta y por lo tanto visible. Si realmente emitieran solo ultravioleta no veríamos nada salvo la luz reflejada por el objeto. Las luces de prueba de billetes se basan en este fenómeno. Algo fluorescente si deja de ser iluminado cesa de brillar de inmediato.

FOSFORESCENTE: Sustancia que continúa brillando sin producir calor por un corto lapso al interrumpir la iluminación. El brillo dura poco y luego a menos que reciban una gran cantidad de luz los materiales fosforescentes se vuelven totalmente opacos. Su efectividad en las moscas es despreciable comparada a colores fluorescentes.

LUMINISCENCIA: Es la emisión de luz no relacionada con procesos incandescentes o de calor. Puede ocurrir a muy bajas temperaturas y ser iniciada por procesos biológicos como en la bioluminiscencia de animales y sistemas biológicos, o procesos químicos como en la quimioluminiscencia asociada a compuestos orgánicos que al mezclarse espontáneamente emiten luz hasta agotar la reacción como en las barritas de Cyalume. La energía estática produce luminiscencia en algunos materiales conductores. También la fluorescencia y fosforescencia son procesos de luminiscencia. Muchos materiales de atado que pensamos fluorescentes no lo son. Un color muy brillante puede hacernos pensar que es fluorescente cuando no lo es. Los pigmentos fluorescentes son difíciles de incorporar a los materiales de atado naturales como plumas y pelos y si los probamos con una luz negra en el mejor de los casos veremos que los pigmentos fluorescentes aparecen como manchas en el material sin teñirlo del todo. Los sintéticos en cambio responden bien a la incorporación de pigmentos fluorescentes y es allí donde debemos orientar la búsqueda de fluorescentes verdaderos. A simple vista tenemos que elegir los materiales fluorescentes solo si notamos que reflejan más luz que la que están recibiendo para lo cual hay que compararlos con iguales colores no fluorescentes en igual luz.

UN MUNDO DE POCOS COLORES
Como pescadores principalmente debe interesarnos lo que sucede con los colores normales y fluorescentes en los diferentes tipos de agua, a diferentes profundidades, a corta y larga distancia y sobre diferentes fondos. La marina de los Estados Unidos, especialmente la rama submarina fue la primera en hacer estudios de colores bajo el agua. Los buzos probaron los colores que notaban mejor en diferentes tipos de aguas y los resultados fueron los siguientes. En aguas muy claras los azules y amarillos no fluorescentes y los verdes y blancos fluorescentes eran muy visibles. En aguas de claridad moderada los blancos, amarillos y anaranjados no fluorescentes y los verdes y anaranjados fluorescentes eran los que mejor veían. En aguas con menos de un metro de visibilidad los colores mejor detectados por los buzos eran el blanco, amarillo y anaranjado dentro de los no fluorescentes y los anaranjados y rojos fluorescentes. Los fluorescentes siempre se veían mejor que los otros y en aguas turbias ciertos colores viraban hacia colores de mayor longitud de onda pareciendo todos iguales. Si miramos nuevamente los colores que penetran mejor en los diferentes tipos de agua en los gráficos, nos daremos cuenta lo mucho que puede variar el color de las moscas en los primeros 15 metros de profundidad siendo este el rango donde mayormente pescamos. Salvo que pesquemos casi en superficie nuestras moscas pueden cambiar totalmente bajo el agua al ser iluminadas por luces muy diferentes.

LUZ Y MOSCAS
Para entender el efecto de la luz en nuestras moscas debajo del agua tenemos que entender que mezclar pinturas es diferente a mezclar luces o mezclar luz con pintura. Si mezclamos por ejemplo pintura roja con azul obtenemos un tono de violeta. Si en cambio combinamos una luz azul con una roja resulta luz blanca. Pero si iluminamos una mosca roja con luz pura azul el resultado es una mosca negra. A diferentes profundidades cada tipo de agua ilumina la mosca con un color diferente y esto la cambia mucho. Ya antes habíamos mencionado que los colores no fluorescentes necesitan ser iluminados con luz del mismo color para que se vean como tales, iluminados con luces de menor o mayor longitud de onda cambian notablemente. El agua a cierta profundidad tiende a tornarse monocromática dejando pasar solo un tipo de luz y este tipo de luz es el que iluminará las moscas. Dependiendo el tipo de agua a cierta profundidad la luz puede ser solo azul, verde, amarilla, anaranjada o roja y el color de la mosca resultará de la combinación del color de esta luz con el color del agua. Los únicos colores que seguirán manteniendo su color original serán los que tengan el color reinante en el agua y los fluorescentes de longitud de onda mayor siempre que miremos a estos últimos de cerca. Lo importante es una vez determinado el color que tomará la mosca es saber si este se distinguirá del fondo contra el que se la mire. En aguas claras por ejemplo a más de 20 metros de profundidad la única luz que llega es la azul y todo cambiará de acuerdo a ella. Si usamos una mosca roja, anaranjada, marrón será lo mismo, se verán negras. En cambio una mosca azul se verá azul pero se confundirá con el azul del agua lo que tampoco nos sirve. Moscas blancas y amarillas virarán al celeste pero serán visibles contra el azul más oscuro del agua, lo mismo que las negras. Por esto si una trucha mira a través del agua contra el fondo azul del agua tanto moscas claras como oscuras funcionarán bien. Si queremos podemos limitarnos a blanco y negro. Si la trucha mira hacia el fondo propiamente dicho y este es oscuro la mosca blanca será más visible, si el fondo es de arena clara la mosca negra se verá mejor que la blanca. Si la trucha mira hacia arriba hacia la superficie iluminada del conocido cono de luz la mosca negra mostrará una silueta perfecta, fuera del cono de luz la superficie espejada refleja el fondo y si este es oscuro una mosca clara es detectada primero. Es en las aguas superficiales donde los peces reciben colores de las márgenes y donde la mayoría de los colores del espectro alcanzan a llegar por lo que aquí sí podemos jugar más con el color de la mosca sabiendo que no cambiará tanto salvo que pongamos mucho agua entre el pez y la mosca. Cuando actuamos a mucha profundidad aún los colores fluorescentes finalmente tomarán el color general del agua pero para esto en aguas claras hacen falta unos 70 metros, mucho más allá de las necesidades de un mosquero. En las profundidades que pescamos podemos confiar en que los colores fluorescentes seguirán brillando con su color si la luz que tiene el agua es de menos longitud de onda que el color que estamos usando. El rojo o rosa fluorescentes se ven claramente en todo tipo de aguas porque aún en aguas que trasmiten solo luz roja a cierta profundidad seguirán brillando fieles a su color. En cambio si usamos azul fluorescente en agua que permite solo el paso de luz roja de mayor longitud de onda, el azul se verá negro. Nuevamente estudiemos los esquemas para ver que colores comunes y fluorescentes se verán mejor y no nos olvidemos del fondo sobre el que actúa la mosca y la cantidad de agua entre esta y el pez. En ríos y lagos turbios el agua se vuelve monocromática mucho antes por la gran cantidad de materia en suspensión, solo que en vez de penetrar la luz azul lo hace la roja como en nuestros ríos norteños donde el sedimento marrón filtra todos los colores menos el anaranjado y rojo.

VISIÓN A DISTANCIA
Paralelamente si el pez está viendo la mosca de lejos el color del agua además creará un velo sobre la mosca cubriéndola de una capa translúcida similar al color del agua. Como si viéramos a través de un vidrio de color. Los colores que igualen el color de la luz del agua serán los que se vean como tales desde más lejos. Los fluorescentes pese a mantener su color a mucha profundidad pierden brillo rápidamente cuando ponemos agua entre ellos y el observador. Ver una mosca a distancia equivale a mezclar dos pinturas, el color del agua y el color de la mosca. Una mosca roja en aguas claras a poca profundidad si la miramos desde lejos al sumarle el azul del agua puede volverse violeta incluso negra. Una trucha que se acerca desde lejos primero ve una mosca negra, de repente a acercarse se torna violeta y al acortar a distancia de ataque la mosca se torna rojo brillante. Esto puede asustar a la trucha y en los casos en que atraemos peces desde lejos conviene usar colores que no cambien tanto ni con la profundidad ni con la distancia como los negros y otros oscuros como el oliva y marrón. Una mosca roja a buena profundidad sería vista como negra de lejos y de cerca sin asustar a los peces con un cambio repentino. Los fluorescentes se comportan como el rojo apareciendo apagados desde lejos y brillantes de cerca, conviene no usarlos demasiado por esto en aguas de lagos muy claras donde los peces pueden venir de lejos y ver el cambio de brillo. Conviene reservarlos para los días oscuros y las aguas turbias donde no existe la visión lejana y necesitamos alto contraste de cerca. Si ordenamos los colores por su longitud de onda tendremos una serie de bandas comenzando por el violeta pasando al azul, verde amarillo anaranjado y rojo. Si trasladamos estos colores bajo el agua a poca profundidad y comenzamos a mirarlos cada vez desde mayor distancia los colores con longitud de onda diferente a la del color del agua rápidamente pierden brillo y se vuelven difíciles de ver aún los fluorescentes, que brillan nuevamente si nos acercamos. En aguas claras del sur los primeros colores en desaparecer son los anaranjados y rojos permaneciendo los azules y verdes visibles desde lejos siempre que el fondo o el agua no los oculte. Los mismos colores sumergidos en aguas verdes se comportarán totalmente diferente. Los primeros en desaparecer serán el violeta y el rojo, luego el anaranjado quedando visibles a la distancia el verde y amarillo. En aguas turbias de río prácticamente todos los colores desaparecerán rápidamente menos el anaranjado y rojo. En las aguas negras los que se ven desde lejos son el amarillo y anaranjado. Tanto en las aguas verdes como marrones el cambio de los colores por la distancia no es tan importante como en aguas claras donde los peces pueden venir desde lejos a buscar la mosca Resumiendo a larga distancia y poca profundidad el blanco toma el color del agua pero no brilla, los fluorescentes pierden brillo y los colores que igualan el color del agua permanecen brillantes hasta la distancia máxima de visión que permita el agua. Recordemos que brillo es la capacidad de un objeto para reflejar grandes cantidades de la luz que recibe.En aguas claras podemos ver hasta unos treinta metros pero en los ríos marrones donde pescamos dorados la visión a distancia puede reducirse a poco más de un metro y es aquí donde el color que más se destaque de acuerdo al día es fundamental. Resumiendo un poco cuando el agua se torna monocromática los únicos colores que permanecen brillantes son los que concuerdan con el color del agua, el blanco y los fluorescentes de mayor longitud de onda que la luz presente en el agua. Todos los demás colores se vuelven oscuros o negros. Que cambien no significa que no sean efectivos lo que interesa es si pueden destacarse del fondo o no. Un color que se vuelve negro contra un fondo claro se ve, contra un fondo oscuro no.


LA IMPORTANCIA DEL FONDO
Cuando un pez mira a través del agua puede hacerlo hacia arriba, a los lados o hacia el fondo. Tomemos por ejemplo un agua clara en un día de sol. Si mira para arriba verá una multitud de colores velados un poco por el azul del agua si el pez mira desde cierta profundidad, si está en los primeros metros el azul del agua no desluce los colores pero si está en el fondo lejos de la superficie los colores se cubren de un velo azulado. Si mira de costado el azul del agua importa para resaltar la mosca ya que si la mosca pasa cerca y es de color azul por ejemplo como este color brillará mucho por coincidir con el color del agua la verá bien pero la misma mosca azul a lo lejos y con el velo del agua será imposible de detectar. Aquí tendremos que recurrir a colores de alto contraste con el azul del agua como blanco, negro y algunos fluorescentes verdes, anaranjados y rojos aunque no brillen tanto a cierta distancia. colores que se vuelvan oscuros con luz azul. Cuidado con los metalizados que solo son reflectores y pueden como un espejo confundirse con el entorno si no reciben el ángulo de luz indicado para devolver destellos. Si el pescado mira hacia el fondo el color de este es importante, ante un fondo claro tenemos que usar moscas oscuras o fluorescentes verdes, naranjas y rojas, recuerden que estamos en agua azul (agua clara). Si el fondo es oscuro nuevamente los mismos fluorescentes y el blanco puro son de alto contraste. Si la profundidad es grande y no puede verse el fondo el azul del agua se torna casi negro y nuevamente necesitamos moscas fluorescentes o blancas. Las aguas claras en días nublados se vuelven muy oscuras y los colores que mejor se ven son los blancos puros, colores claros, y los fluorescentes especialmente el rojo. En aguas verdes, marrones o negras sucederá algo muy parecido solo disminuyendo la distancia a la que pueden ver los peces respecto al agua clara. Como estas agua filtran la luz diferente los colores que veremos brillantes de cerca cambian, incluso los fluorescentes, la visión a larga distancia no es muy importante en aguas barrosas y verdes y solo un poco más elevada en aguas negras. En aguas verdes los colores verdes y amarillos brillan más por acercarse al color del agua y los fluorescentes violetas, y azules se vuelven oscuros destacándose los Anaranjados y rojos, el verde fluorescente puede verse mal si el agua trasmite demasiada luz amarilla de mayor longitud de onda que el verde. Los colores normales diferentes al amarillo o verde funcionan como colores oscuros o a lo sumo si son claros toman el color del agua pero no brillan como los colores que coinciden con el color del agua. En un agua verde un día nublado a corta distancia puede que los peces solo puedan ver colores como el blanco, el anaranjado fluorescente y el rojo fluorescente al tornarse el medio muy oscuro. En un día de mucho sol los peces miran contra un agua verde intenso y se verán bien las moscas negras o anaranjadas y rojas fluorescentes. En aguas marrones en un día nublado los colores de alto contraste serán el anaranjado y rojo brillante y el anaranjado, rosa y rojo fluorescentes. En un día de sol el agua toma un tono rojo intenso y solo se destaca bien el color negro, ni siquiera el rojo fluorescente se ve bien en estos momentos. Mi idea este verano es lograr toda una serie de fotos submarinas que complementen esta nota por lo que no se preocupen demasiado si el tema resulta un poco pesado de leer, las fotos aclararán todo. Una forma perfecta de imaginar nuestra mosca bajo el agua mientras tanto, es recorrer las páginas en Internet de fotografía submarina y color bajo el agua. Hay como cuarenta mil entradas sobre este tema y solo basta activar un buscador con las palabras underwater photos, underwater color o color en el agua. El agua clara de mar funciona casi igual que el agua clara del sur.Posiblemente pocos decidan entrar realmente en el mundo de los peces, pero los que lo hagan tendrán sin duda respuesta a infinidad de preguntas que parecen sencillas al mirar con ojos de pez.NdeR: esta nota fue publicada en la revista El Mosquero Platense de la APPM en 2000


ASOCIACIÓN DE PESCA CON MOSCA DE COMODORO RIVADAVIA
Con ojos de pez Por Marcelo Morales


LA MITAD DEL CEREBRO DE UNA TRUCHA ES USADO PARA LA VISION, SI LOGRAMOS ENTENDER COMO VEN EN EL AGUA PODREMOS TENTARLAS CON FACILIDAD.
Cuantas veces al abrir nuestra caja de moscas, atiborrada de modelos y colores diferentes elegimos una confiando en el azar en vez de usar un razonamiento logico.Cuando hay insectos a la vista y las truchas se están alimentando con ellos no se presentan demasiadas dudas para elegir la mosca. Todo se reduce a presentarla correctamente y si logramos el pique hasta tenemos una explicación de las razones que impulsaron a la trucha para tomar nuestra mosca.Pero en los momentos donde las truchas no están a la vista y sabemos que tenemos que atraerlas hacia nuestra mosca llegan las dudas y es donde la caja de moscas con sus cientos de modelos y colores se transforma en un verdadero tormento.Con los años los pescadores han formado conjuntos de moscas que funcionan satisfactoriamente en variadas situaciones. Algunas se parecen a insectos reales y podemos explicar su efectividad debido a esta semejanza pero muchas de las moscas más eficaces no se parecen a nada vivo y la mayoría de los pescadores no tiene idea acerca de la posible razón por la cual son atractivas a los peces.Para evitar problemas se ha llamado a estas moscas ATRACTORS, y para simplificar el tema aún más, es muy aceptado que estas moscas deben su eficacia a su atractivo movimiento, llamativo color, o forma novedosa que no fue vista anteriormente por la trucha lo que la tienta a probarla.Todo es válido en determinadas condiciones pero es un tema que no merece ser tomado de una manera tan simple y llana y puede ser estudiado con un poco más de profundidad empleando conocimientos de biología, óptica, fisiología, física y otras ciencias que lejos de ser complicados, ayudan a explicar muchas cosas como veremos a lo largo de esta primera nota sobre el tema.

PROGRESAR IMPLICA CUESTIONAR LOS MEJORES CONOCIMIENTOSLa única manera de progresar como pescador de mosca es probando la veracidad de los conocimientos considerados como de máximo nivel. Solamente cuestionando los conocimientos más elevados podremos acceder a niveles superiores ya sea reafirmando lo que se daba por cierto o probando lo equivocados que estábamos.Los pescadores arrastran consigo infinidad de teorías y mitos de vieja data que pasan de generación en generación sin mayores alteraciones a pesar que estudios no tan recientes han demostrado lo equivocado de esos pensamientos.Un gran número de pescadores todavía cree que las truchas no ven los colores, que no ven a distancia, que su visión del mundo exterior es reducida, que pueden rechazar una mosca artificial por la cantidad de patas pero sin molestarse por el anzuelo, que en los días de sol hay que usar moscas brillantes, o en los nublados moscas oscuras, que no comen en las aguas turbias, que nuestras moscas se ven igual fuera que dentro del agua por ser ríos y lagos donde viven las truchas muy cristalinos, y tantas ideas fijas con las que cargamos a la hora de pescar.

LA LUZ QUE LLEGA A NOSOTROS ES DIFERENTE DE LA QUE LLEGA A LAS TRUCHAS

Para entender muchas de las cosas que nos suceden con nuestras moscas es muy importante entender el fenómeno luminoso tanto en el aire como en el agua, y sobre todo en diferentes tipos de aguas, en diferentes condiciones climáticas, a distintas profundidades y con diferentes fondos.Las truchas viven en un medio donde los colores son alterados por el tipo de agua que filtra selectivamente la luz, por la dirección hacia donde la trucha mira y el color del fondo sobre el cual presentamos la mosca.Los colores que acostumbramos ver en nuestras moscas cambian drásticamente debajo del agua y muchas moscas de colores absolutamente diferentes a la luz del día se ven iguales a solo un par de metros de profundidad. En este caso la efectividad de una mosca sobre otras no se debe al color y tenemos que buscar la razón en otra característica.Hay colores como los fluorescentes que mantienen sus características de brillo y tono independientemente del color y profundidad del agua y tenemos que saber como usarlos para lograr moscas que puedan ser fácilmente localizadas por los peces en cualquier condición de agua.Si ya leemos correctamente un río y sabemos presentar diferentes estilos de moscas, un conocimiento de la visión de las truchas en su medio nos permitirá experimentar y entender porqué algunas moscas funciona en determinado momento, reduciendo nuestros errores y dudas de una manera extraordinaria.Es importante reconocer que muchas moscas funcionan porque acertamos con el color indicado y la trucha puede verlas diferenciándolas del entorno con claridad.La mayoría de los organismos que sirven de alimento a las truchas se presentan en colores que les permiten pasar desapercibidos, y tanto a la trucha como a nosotros nos cuesta verlos gran parte del tiempo.Cuando empleamos una mosca de colores apagados similares a los de un insecto real, la mosca puede pasar desapercibida, camuflada tal como sucede con cientos de insectos naturales que logran pasar al lado de la trucha sin ser detectados.No es nada raro que una trucha tome nuestra mosca en medio de un grupo de insectos reales, a pesar que la mosca no se parezca demasiado a los mismos. Simplemente pudo verla mejor.La mayor parte de las moscas de gran rendimiento son moscas fáciles de ver, exhiben colores que no cambian bajo el agua lo que las diferencia del entorno, o detalles que llaman la atención. Después de todo una trucha no puede resistir la tentación de probar con la boca cada posible bocado que se pone a su alcance, pero tiene que verlo.Tomemos por ejemplo la ninfa conocida como Prince, sus blancas antenas son claramente visibles a larga distancia. El color blanco es uno de los colores fáciles de ver a gran distancia en muchos tipos de aguas, especialmente a cierta profundidad y sobre fondos oscuros. La misma prince sin las antenas blancas es otra cosa.Las moscas negras son altamente eficaces en todo momento simplemente porque el color negro es uno de los colores de alto contraste en casi todas las pruebas bajo el agua salvo en contadas ocasiones como veremos luego.El color de las moscas es fundamental en los modelos que se hunden porque a cierta profundidad la luz cambia totalmente dándole a todas las cosas el mismo tono. Si no logramos destacar nuestra mosca puede no ser vista y resultar poco efectiva. En las moscas flotantes el color no cambia porque están iluminadas por la misma luz que percibimos nosotros sin el filtro del agua.EL OJO DE LA TRUCHASi entrar en detalles tediosos sobre la morfología de este órgano es necesario al menos conocer algunos datos.El ojo de las truchas es uno de los más desarrollados entre los peces. En cierto modo se parece bastante a los nuestros y puede ver perfectamente los colores incluso es capaz de percibir longitudes de onda invisibles al ojo humano.Las mismas sustancias químicas reactivas a los colores presentes en diferentes animales se hallan en los ojos de una trucha.Como los nuestros el ojo de la trucha presenta una lente que distribuye la luz enfocándola hacia las ultra sensitivas células que tapizan la retina ubicada al fondo del ojo antes de la membrana coroides y la esclerótica. A diferencia de la nuestra la lente del ojo de la trucha es esférica y se enfoca desplazándose hacia atrás sin cambiar de forma por la acción de poderosos músculos. Nuestra lente cambia de forma para enfocar a diferentes distancias, la de una trucha se mueve.Nuestros ojos presentan un mecanismo para regular la intensidad de luz que entra a los mismos formado por el iris y su diafragma que se ajusta rápidamente a la cantidad de luz presente.Las truchas también tienen un iris que se ajusta pero en mucho menor medida que el nuestro por lo que su mecanismo de ajuste para distintas intensidades de luz está en la retina donde se hallan las células sensibles intensidad de la luz y los colores.La capa sensible de la retina tiene dos tipos de células receptoras: los bastones y los conos.Estas células están conectadas directamente con nervios que envían las señales al cerebro.Los bastones son células capaces de detectar niveles mínimos de intensidad luminosa y no son capaces de transmitir información sobre colores. Los conos son células sensitivas al color y funcionan principalmente durante las horas diurnas. El ojo de la trucha se ajusta a diferentes niveles de luz moviendo los conos y bastones. En horas de luz suficiente los conos están en la superficie de la retina y los bastones se hallan retraídos para protegerlos de la luz intensa que puede dañarlos. Cuando la luz disminuye los conos se retraen casi totalmente y los bastones avanzan permitiéndole a la trucha aprovechar la mínima luz presente, siendo los bastones unas cincuenta veces más sensibles que los conos a la luz.Por esto cuando iluminamos a un pez con una linterna en la noche queda totalmente encandilado, cegado totalmente al recibir directamente una luz intensa sobre la capa de bastones demasiado sensibles para una luz fuerte.El cambio de conos a bastones para una visión nocturna tarda varias horas y comienza ni bien comienza a bajar la intensidad de la luz por la tarde. Cuando avanzan los bastones la capacidad de ver colores de la trucha se ve muy disminuida al retraerse los conos y si bien estos no se desactivan totalmente una vez que la trucha pasa a visión nocturna casi no distingue colores y tenemos que resaltar la silueta de la mosca sobre el cielo o fondo.Por esto muchas moscas dejan de ser efectivas por la tarde, simplemente las truchas pierden la capacidad de verlas y se vuelven efectivas moscas de alto contraste como las negras si la trucha mira contra el cielo más claro o colores fluorescentes en profundidad que mantienen su brillo con mínimas intensidades de luz.La trucha ve muy bien por la noche utilizando la escasa luz reinante que nosotros no podemos emplear. Puede distinguir perfectamente silueta y tamaño de la mosca aunque la información sobre color se reduce al mínimo.Cuando se acerca el día los bastones se retraen y los conos avanzan de modo que la trucha pueda ver los colores con las primeras luces del día.Estos procesos en el ojo de una trucha son muy importantes para el pescador y nos dicen cuando enfatizar colores para que la mosca sea fácilmente vista y cuando delinear siluetas.Básicamente durante las horas de luz tenemos que conocer que colores la trucha puede ver mejor de acuerdo al tipo de agua y en horas de escasa luz tendremos que buscar moscas de buena silueta y vibraciones en el agua.Recordemos que el sistema sensorial de una trucha que detecta vibraciones en el agua está muy desarrollado y en sus correrías nocturnas o en aguas turbias es muy empleado para localizar el alimento cuando la vista no es suficiente. Cuidado con el olfato que es otro sentido muy desarrollado, una mosca contaminada de olores desagradables puede hacer que una trucha voltee espantada a ultimo momento.

EL FENÓMENO LUMINOSO.La luz que vemos proviene fundamentalmente del sol en forma de ondas electromagnéticas. Estas ondas se diferencian por la longitud de onda de cada una y el ser humano solo puede ver una parte del espectro conocida como luz visible.La luz de menor longitud de onda que podemos percibir es la violeta, seguida por los colores índigo, azul, verde, naranja y rojo en los cuales la longitud de onda va creciendo.Todos los colores al unirse forman la luz blanca. No podemos ver longitudes de onda inferiores las que presenta la luz violeta ni superiores a la de la luz roja.La luz ultravioleta con longitudes de onda inferiores a la violeta no puede ser detectada por el ojo humano como tampoco podemos ver la luz infrarroja con longitudes de onda superiores a la luz roja.El agua actúa como filtro de algunos colores de la luz que llega a ella, absorbiendo colores del espectro luminoso de acuerdo al tipo de agua y los sedimentos presentes.Al absorber colores nuestras moscas hundidas no se verán como las vemos en el aire y una mosca roja, puede verse a pocos metros de profundidad exactamente igual que una de color marrón, azul, negra o naranja.Tenemos que recordar que un objeto en el aire lo vemos de un color determinado porque refleja la luz de ese color presente en la luz blanca. Si al mismo objeto lo iluminamos con una luz que no incluye la del color del objeto lo veremos totalmente diferente.Cuando vemos un color por ejemplo el rojo, solo lo vemos rojo si la luz que lo ilumina por ejemplo la luz blanca contiene luz roja, y el objeto iluminado puede efectivamente reflejar luz roja, absorbiendo los demás colores de menor longitud de onda.El agua produce un enorme cambio en los colores de las moscas ahogadas porque aún las aguas más claras actúan como filtro impidiendo que algunos colores de la luz blanca penetren más allá de la capa superficial. Ver foto de la trucha bajo el agua.Si tomamos un agua totalmente clara veremos que a los tres metros de profundidad la luz azul solo ha perdido un 2% de su intensidad, la verde un 10%, la amarilla un 25%, la naranja un 45% y la roja un 90%.Un color lo vemos brillante cuando refleja gran cantidad de luz del mismo color, si la intensidad de la luz de ese color es baja o si lo iluminamos con una luz diferente de menor longitud de onda veremos un color totalmente oscuro y apagado, incluso negro.Todos las moscas cambian mucho de color bajo el agua debido a que el agua filtra muchos colores eliminándolos incluso totalmente a cierta profundidad. Una mosca roja al metro y medio de profundidad empieza a cambiar de color a naranja para volverse verde, marrón y negra a unos 9 metros aún en agua totalmente clara.Los colores fluorescentes en cambio tienen la particularidad de convertir luz de menor longitud de onda y reflejarla con una longitud de onda mayor. Por esta razón se ven tan brillantes. Pueden transformar la luz ultravioleta que normalmente no vemos reflejándola como luz visible por lo que parecen mucho más brillantes que la luz que reciben.Un color rojo normal solo se verá rojo si lo ilumina una luz que incluya la roja entre sus componentes en cambio un rojo fluorescente se verá rojo brillante aún si lo iluminamos con luces de menor longitud de onda como la ultravioleta, azul, verde, amarilla, o naranja.Esta característica de los colores fluorescentes de mantener el tono a grandes profundidades donde mayormente llega luz azul es muy importante para que nuestras moscas se vean y no por nada muchas moscas altamente efectivas en condiciones de iluminación pobres incluyen detalles fluorescentes.La luz blanca que vemos es una combinación de todos los colores visibles al ojo humano del espectro electromagnético. Iluminados por luz blanca del sol o una bombilla podemos apreciar colores y matices que no se verán bajo el agua, por esta razón las filmaciones subacuáticas necesitan poderosos reflectores de luz blanca para resaltar los colores de peces y otras criaturas. Si no se emplearan luces todo se vería oscuro y monocromático en tonos azules, verdes, o negros y grises dependiendo del tipo de agua y profundidad.

TIPOS DE AGUA Y SU EFECTO EN LAS MOSCASCuando pescamos una mosca debajo de la superficie, la luz es filtrada por el agua tornándose azul, verde, amarilla, naranja o roja dependiendo de la turbidez del agua y la profundidad.Al incidir una luz monocromática sobre la mosca los colores de la misma cambian totalmente y puede que muchas moscas totalmente diferentes a simple vista con luz blanca a los ojos de los peces sean todas iguales.Generalmente los pescadores prueban y prueban hasta que algo funciona, pero una vez lograda una mosca efectiva no saben porque lo es por desconocer el aspecto de la mosca bajo el agua.Cuantos se han tirado a la pileta para conocer como lucen las moscas a diferentes profundidades y con distintas intensidades de luz. Seguramente muy pocos y por esto se recurre al cambio continuo de moscas que no es uno de los métodos más eficientes especialmente cuando no tenemos ni idea acerca del porqué cambiamos una mosca por otra. La estética de la mosca y sus colores a la luz del día nada tienen que ver con la imagen que recibe la trucha en su medio líquido y es muy importante que comencemos a entender como ven los peces.Hace muchos años llegó a mis manos un libro que lamentablemente presté y nunca volvió, donde se mostraba claramente a través de una serie de fotos los cambios de los colores bajo el agua.Para las fotos se usaban paneles con colores pintados normales y fluorescentes, estos paneles tenían fondos oscuros y claros y las pruebas se realizaban hasta profundidades de treinta metros en diferentes tipos de aguas.A cierta profundidad en aguas claras la mayoría de los colores normales se vuelven totalmente oscuros y solo los fluorescentes siguen brillando con su color original por su cualidad de convertir luz de menor longitud de onda en otra de longitud más alta.Por algo los señuelos de trolling profundo que mejor funcionan son siempre fluorescentes. El rojo y naranja fluorescentes son los que mejor se ven a gran profundidad.Los colores no fluorescentes cambian drásticamente a cierta profundidad. Los rojos y naranjas se vuelven marrones o negros, los azules y verdes se mantienen algo mejor y los fluorescentes no cambian manteniendo el color de superficie.Cuando la luz penetra bajo la superficie del agua parte del espectro es absorbido y se transforma en calor, y de acuerdo a la turbidez o color del agua algunos colores alcanzan diferentes profundidades.El cambio de color de la mosca cuando una luz monocromática incide sobre ella puede explicar claramente porqué moscas muy diferentes a simple vista son efectivas en el mismo lugar y a la misma profundidad, simplemente como los colores cambian por efecto de la luz filtrada por el agua pude que moscas totalmente distintas de color como verdes, naranjas y rojas se vean del mismo color bajo el agua y su éxito se deba a que se recorten claramente contra un fondo más oscuro o claro ya sea del fondo o de la masa de agua entre los peces y la mosca.Una mosca que se ve clara sobre un fondo claro no se ve en cambio una mosca oscura sobre el mismo fondo es detectada fácilmente por los peces y esto es lo que pasa generalmente con las moscas que funcionan. Si aprendemos un poco acerca de los colores bajo el agua podremos maximizar el contraste de las moscas para que las truchas y otros peces cazadores las vean mejor desde mayor distancia lo que incrementará la posibilidad de pique enormemente como lo he comprobado infinidad de veces.El pez cazador tiene que ver la mosca, cuanto más lejos la vea mejor y para esto tenemos que usar los colores olvidando lo que pensamos como seres humanos. Las truchas tienen un cerebro del tamaño de un maní y no piensan en los colores como nosotros, el color tal como lo vemos y lo interpretamos es un razonamiento puramente intelectual y no significa nada para los animales o incluso una persona que no recibió instrucción al respecto.Cuando iluminamos un color con una luz monocromática o que no contenga ese color suceden cosas curiosas.Por ejemplo si iluminamos algo rojo con luz pura azul el color que veremos será negro. Si el objeto es rojo fluorescente lo veremos en cambio rojo porque la pintura fluorescente transforma la luz azul de menor longitud de onda reflejándola como roja de mayor longitud de onda. Por otro lado si iluminamos un color fluorescente con una luz de mayor longitud de onda no puede reflejarla y se vuelve oscuro. Azul fluorescente iluminado con luz roja se ve negro. Debido a esto el rojo fluorescente es el más buscado porque brilla fiel a su color aún en aguas turbias donde la luz amarilla, naranja y roja son las menos absorbidas.Cuando usamos una mosca hundida si sabemos como cambia el color de la misma según la luz que recibe en cada tipo de agua podremos elegir una mosca que rápidamente vista por los peces.Según el tipo de agua la luz que recibe la mosca puede ser azul, verde, amarilla, naranja o roja.Al mismo tiempo si la trucha ve a la mosca a lo lejos el color del agua entre la mosca y la trucha influye en la visión a larga distancia como si cubriéramos la mosca con un velo del color del agua reinante, por ejemplo verde o azul en aguas claras. Este velo desaparece cuando la trucha se acerca a la mosca y esta puede cambiar súbitamente de color asustando a la trucha lo que complica un poco las cosas.Para entender esto tomemos una mosca roja a poca profundidad. La luz roja la ilumina y la mosca de cerca se ve roja pero para una trucha que la está mirando desde lejos a través de una masa de agua azul la mosca puede ser violeta. Al acercarse rápidamente la trucha para tomarla acorta distancia y el velo azul desaparece tornándose la mosca roja de golpe. Ante esto muchas veces la trucha se asusta y es una situación muy común cuando pescamos en lagos donde la trucha sale de lejos a buscar la mosca y la rechaza a último momento. Por esto también son menos rechazados los colores negros u oscuros que no cambian como los azules, naranjas, amarillos y rojos en baja profundidad.Este cambio de color en la mosca solo sucede a baja profundidad donde varios colores de la luz visible pueden penetrar y solo si la trucha viene de lejos a través de una masa de agua coloreada que apaga el color a la distancia. Este experimento es muy fácil de realizar en una pileta, pero les recomiendo esperar los primeros calores o engañar a nuestras esposas con una escapadita a Brasil en vacaciones de invierno.A medida que tomamos profundidad el agua se torna monocromática y el color que vemos es el que refleja el agua desde la profundidad.


DIFERENTES TIPOS DE AGUASA simple vista tenemos diferentes tipos de aguas: claras, azules, verdes, barrosas y otras como las aguas impregnadas por sustancias tánicas de las selvas tropicales conocidas como aguas negras.Cada una de ellas filtra la luz que recibe de manera diferente de acuerdo a las sustancias en suspensión que tenga.En la próxima entrega veremos como los diferentes tipos de agua al filtrar la luz blanca y dejar pasar determinados colores selectivamente afectando el color de nuestras moscas y la capacidad de los peces para verla.Descubriremos porque una mosca rosa fluorescente es muy efectiva en aguas turbias para dorados en días nublados y porqué falla con días de sol cediendo terreno a una mosca negra.Analizaremos moscas y materiales para saber cuales tienen la calidad de color necesaria ya que no todos los colores que llamamos brillantes lo son y tampoco los materiales que ponemos en nuestras moscas tienen la calidad cromática necesaria. Hay muchos tipos de blancos, rojos y fluorescentes y tenemos que empezar a distinguirlos si queremos diseñar una mosca a través de los ojos de un pez.